RIN TIN TIN: EL HÉROE QUE VINO DE LA GUERRA

Publicado en Pelo Pico Pata nº 111 - Enero 2015

Mucha gente de mi generación, cuando la televisión se veía en blanco y negro, seguro que recuerda una serie de aventuras en el oeste americano, donde el protagonista principal era un perro de raza pastor alemán que luchaba contra los indios y los malvados pistoleros junto al cabo Rusty, un niño adoptado por la caballería de Fort Apache. Se llamaba Rin Tin Tin y fue uno de los perros más famosos del mundo de la televisión. Pero el primer Rinty, como lo llamaba cariñosamente su cuidador Lee Duncan, empezó en el cine mudo en los años 20 y fue uno de los actores más queridos por el público americano. Esta es su historia…

EL HÉROE QUE VINO DE LA GUERRA
Lee Duncan era un sargento americano de la I guerra mundial al que le gustaban mucho los animales. El 18 de septiembre de 1918 los mandos del Batallón 135 aerotransportado lo enviaron en misión de reconocimiento a un campamento alemán abandonado cerca de Lorraine, Francia.

Cuando llegó al lugar se encontró un edificio destruido por los bombardeos y descubrió que había sido una perrera. Entro en él y encontró un montón de cadáveres de perros que habían muerto durante la batalla. Pero cuando estaba a punto de abandonar el lugar, escuchó unos gemidos lastimosos en la parte posterior del edificio y decidió volver tras sus pasos. Allí encontró una perra viva que acababa de dar a luz a cinco cachorros. El sargento Duncan no se lo pensó: cogió a los perritos de pocos días y a su madre y se los llevo de vuelta a la base para cuidar de ellos.

Cuando los cachorros se destetaron, Duncan dio la madre a un oficial y tres perritos de la camada a otros soldados, pero él se quedo con un macho y una hembra a los que llamó Rin Tin Tin y Nanette, como dos muñecos amuletos de la suerte que los niños franceses a menudo regalaban a los soldados americanos. Eran dos preciosos pastores alemanes con una mirada que expresaba gran inteligencia. Mientras Rinty era de un color gris oscuro y tenía los ojos muy negros, la hembra tenia unos colores más claros.

En julio de 1919, Lee Duncan consiguió regresar con los perros a los EE.UU a bordo de un barco. Cuando llegó a Long Island, Nueva York, a causa de los tramites de entrada al país, tuvo que dejar a los perros en cuarentena al cuidado de una criadora de Hempstead, la señora Leo Wanner. Durante este proceso a la perrita Nanette le fue diagnosticada una neumonía y la Sra. Wanner le regaló a Duncan otra cachorrita de pastor alemán. Mientras el sargento se dirigía en tren hacia California, Nanette murió en Hempstead. Como homenaje, Duncan llamó a su nueva perrita con el mismo nombre.

En Los Angeles, Lee Duncan inscribió a Rin Tin Tin en varias exposiciones y concursos caninos. Quería dedicarse a la cría de pastores alemanes y si su perro conseguía buenos resultados, sus cachorros podrían venderse muy bien. Pero Rinty, aunque era un derroche de agilidad, demostró tener un carácter muy fuerte que le ocasionó muchos problemas durante los concursos. Para colmo de males, el pobre perro se fracturo la pata izquierda en un accidente fortuito que le dejó casi totalmente inmovilizado y bajo los cuidados de su dueño durante nueve meses.

Ya recuperado, Rin Tin Tin participó en un concurso de perros donde sorprendió a todo el público por su agilidad y destreza, llegando incluso a saltar una altura de más de 3 metros y medio. Este espectáculo fue filmado por una cámara y Duncan, después de ver las imágenes, se entusiasmo tanto que pensó en probar suerte en el cine. En aquel momento, además, ya había una estrella canina en las pantallas de America: otro pastor alemán de nombre Strongheart.

EL NACIMIENTO DE UNA ESTRELLA
Después de visitar varios estudios cinematográficos sin éxito, un día se encontró con un equipo de rodaje intentando filmar una escena con un perro que debía actuar como un lobo, pero el perro-actor no tenía el día y no seguía correctamente las instrucciones de su adiestrador. Lee Duncan se acercó al director con Rin Tin Tin y le aseguró que su perro podría hacer la escena en una sola toma y así lo hizo. Fue la primera aparición en el cine de la que después sería una gran estrella canina y el equipo de rodaje que lo contrató pertenecía a un pequeño estudio cinematográfico llamado Warner Brothers Pictures.

Rin Tin Tin participó en más de veinte películas y logró una gran popularidad. Representaba al gran héroe americano y además era un inmigrante. Duncan lo entrenó tan bien que era capaz de actuar en escenas espectaculares de lucha, saltando grandes alturas, subiéndose a los árboles y a la vez clavar una expresión casi humana en cualquier momento de la película.

Tal como explica Susan Orleans, autora del libro “Rin Tin Tin” The Life And The Legend” (Atlantic Books, 2012): “Una de las razones de su éxito fue que apareció en la época del cine mudo, donde los perros y las personas estaban a la par. Nadie tenía el poder de la palabra y, por otra parte, lo perros se ven mucho más naturales no hablando que las personas. Eran héroes silenciosos perfectos”.

Rin Tin Tin llegó a actuar con grandes actores del cine mudo a los que eclipsaba incluso en los carteles del cine. Su nombre era el que normalmente aparecía por encima del titulo. Llegó a tener millones de fans entre las que se encontraba la gran actriz Greta Garbo y en muchos lugares, las autoridades lo recibían con grandes honores.

Al dueño del estudio, Jack Warner, que no le gustaba demasiado utilizar animales actores, tuvo que rendirse a la evidencia del éxito de las películas de Rin Tin Tin. Incluso llegaron a llamar al perro “el levantador de hipotecas”, pues cada vez que Warner se encontraba con dificultades financieras, estrenaban una película de Rinty y se arreglaban las cosas.

Los descendientes de Rin Tin Tin se vendían a precios altísimos y los perros de su raza se convirtieron en lo más solicitados de América. A está fama también ayudo la gran operación de marketing que los relaciones publicas efectuaron en el caso de la raza pastor alemán: como en Estados Unidos existía un prejuicio hacia todo lo alemán debido a la guerra, tuvieron la brillante idea de cambiar el nombre de perro pastor alemán por el de Perro Policía o perro lobo.

El éxito de esta estrella canina fue tan impresionante que incluso fue nominado al Oscar al mejor actor en la primera ceremonia de estos premios, en 1929. Pero la academia decidió que entregar a un perro el Oscar podría dañar el prestigio de muchos grandes actores humanos.

Pero la fama no dura siempre y cuando llegó el cine sonoro, la Warner Bros rescindió el contrato a Duncan. Los estudios cinematográficos se decantaban por las películas habladas y para el público no era muy interesante un protagonista canino que no pudiera expresarse con el habla. Rin Tin Tin acabó haciendo películas de serie B durante el resto de su vida.

LA LEYENDA Y SU LEGADO
Tras casi catorce años de carrera cinematográfica Rin Tin Tin murió el 10 de agosto de 1932 y como todas las grandes estrellas del cine, su historia no está libre de leyendas. Se cuenta que el alcalde de Nueva York le entregó las llaves de la ciudad, que desayunaba filet mignon y que murió en los brazos de la actriz Jean Harlow.

La noticia de su muerte conmocionó al público americano. La programación de radio fue interrumpida en todo el país para anunciar su fallecimiento. Apareció en todos los obituarios ensalzando sus virtudes. Rin Tin Tin se había convertido en leyenda.

Su cuidador, adiestrador y amigo Lee Duncan trasladó su cuerpo al cementerio de los perros de París y poco después instalaron en su memoria una estrella en el Paseo de la Fama.

Los descendientes de Rin Tin Tin siguieron actuando en varias películas sin tanta suerte, pero en 1954 la cadena ABC estrenó con gran éxito la serie de televisión donde el protagonista era un perro llamado Rin Tin Tin. Aunque el primero de los perros utilizados en la serie fue el cuarto en la descendencia del original Rinty, fueron cambiando con otros perros que nunca llegaron a consolidarse individualmente como grandes actores.

La serie estuvo en cadena desde 1954 hasta agosto de 1959, y gozo de tanta popularidad que hicieron varias reposiciones con igual éxito. Son los capítulos que muchos de la generación de los años 60 y 70 recordamos. Como dato curioso hay que apuntar que las aventuras de Rin Tin Tin de la televisión ocurrían en el Lejano Oeste y la raza de pastor alemán sólo existe desde 1899, cuando lo desarrolló Max Emil Friedrich von Stephanitz en Alemania.

Educación y adiestramiento canino JR Batallé